SALUD
28 de mayo de 2025
Los pediatras alertan por los efectos nocivos del vapeo en adolescentes

En un comunicado difundido por la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), se advirtió que los cigarrillos electrónicos facilitan el inicio del tabaquismo y añaden riesgos, como lesiones pulmonares y efectos negativos en el desarrollo cerebral de los jóvenes
La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) lanzó una severa advertencia sobre el uso y los efectos de los cigarrillos electrónicos, conocidos comúnmente como vapeadores. Lejos de ser una alternativa inofensiva, estos dispositivos son fuente de múltiples daños a la salud, comparable o incluso superior al impacto de los cigarrillos convencionales. Según un comunicado de esa entidad médica, los cigarrillos electrónicos contienen nicotina y otras sustancias nocivas que fomentan la adicción al tabaco entre los jóvenes.
En el comunicado, la SAP subrayó la preocupación por el incremento en el consumo de vapeadores, especialmente entre los adolescentes, aun cuando la venta de esos dispositivos no está autorizada en la Argentina. La percepción errónea de que los cigarrillos electrónicos son menos perjudiciales ha hecho que se conviertan en la puerta de entrada al tabaquismo y otras adicciones.
La Dra. Silvia Cabrerizo, pediatra y toxicóloga, secretaria del Grupo de Trabajo de Consumos Problemáticos de la SAP, enfatizó que los vapeadores contienen sustancias químicas como propilenglicol, diacetilo, glicerina vegetal, acroleína formaldehido, “además de otros ingredientes muchas veces desconocidos o sobre los cuales no se testearon sus consecuencias en la inhalación”.
Ante la consulta de Infobae, la doctora Cabrerizo, señaló que “muchas veces ni los padres ni los chicos conocen los riesgos que trae asociado el vapeo”
“El atractivo de los cigarrillos electrónicos radica en su presentación. Los dispositivos a menudo imitan artefactos electrónicos y vienen decorados con personajes de dibujos animados, colores brillantes y sabores que van desde frutas hasta caramelo y chocolate. Lo que tenemos que tener presente es que están dirigidos a un público, digamos, joven, y que los adolescentes, el cerebro adolescente, termina su desarrollo después de los 20 años, con lo cual es más propenso, digamos, a generar dependencias cuando introducimos alguna sustancia psicoactiva. ”, agregó.
Estos dispositivos también incluyen ingredientes de los que muchas veces se desconocen los efectos a largo plazo de su inhalación. En su documento, la SAP subrayó la presencia de sustancias que no solo incrementan el riesgo de cáncer, sino que también tienen el potencial de afectar otros aspectos de la salud. La Dra. Hilda Giugno, médica pediatra y neumonóloga y secretaria del Comité de Neumonología de la SAP resaltó la urgencia de abordar este problema dado el acceso fácil a estos productos mediante canales ilegales de venta.
Prohibición legal y comercio ilegal de vapeadores
Aunque en Argentina está oficialmente prohibida la venta, distribución y promoción de cigarrillos electrónicos, la realidad indica que estos todavía están al alcance del público debido a un comercio ilegal. La SAP manifestó su preocupación frente a esta situación, al plantear que el origen y los procesos de fabricación de estos productos son a menudo desconocidos, lo que aumenta aún más los riesgos asociados con su consumo.
“Es importante aclarar que en la Argentina está prohibida tanto la venta, como la distribución y promoción de estos dispositivos vapeadores. Sin embargo, están al alcance de cualquiera debido a un comercio ilegal y se desconocen su origen y los procesos de fabricación”, aseguró la Dra. Giugno, también autora del documento
Las autoridades de la SAP llamaron la atención sobre la falta de control y regulación efectiva para frenar la distribución ilegal de vapeadores. Este problema se ve agravado por las estrategias de marketing que han sabido captar al público joven, mediante publicidad atractiva y empaques diseñados específicamente para ellos. La falta de información y control ha hecho que estos dispositivos, prohibidos por ley, se conviertan en un problema de salud pública significativo.
En 2023, la Encuesta Nacional Anual sobre Tabaco Juvenil realizada en EE..UU. indicó que más de 2,1 millones de jóvenes en ese país usan cigarrillos electrónicos y se atribuye, en buena medida, a las estrategias del marketing de las tabacaleras.